Toda la industria que rodea a la higiene femenina y a la menstruación, es la prueba más evidente de que la comercialización de todo lo que ello conlleva ha pasado a convertirse en un auténtico negocio poco respetuoso con nuestro bolsillo, pero sobre todo con el medio ambiente.
Detrás de la menstruación hay una industria que mueve miles de millones de dólares y que además genera toneladas de basura si hablamos de productos desechables como tampones y compresas.
A pesar de todo esto, cada vez están apareciendo alternativas mucho más respetuosas con el medio ambiente como es el caso de la copa menstrual y la última incorporación más novedosa: las braguitas menstruales.
Una auténtica revolución para el mundo de la lencería, con las que podrás decir adiós a ese derroche de compresas y tampones. Se trata de un nuevo fenómeno de la lencería, que apareció en primer lugar en Asia y al el que las marcas de lencería actuales ya se están sumando. La última en hacerlo ha sido la conocida firma ETAM en colaboración con la firma Smoon.
Tal y como relatan en la página web de la firma, estas braguitas son totalmente « lavables y reutilizables». Además están confeccionadas con materiales como la hidrofilamida, la poliamida, el elastán, el poliéster y el poliuretano.
Estos materiales lo que hacen es drenar, absorber e impermeabilizar la zona. También son transpirables por lo que evitan que la humedad se acumule en esta zona, además son inodoras, antibacterianas y su nivel de absorción es equivalente a dos compresas o incluso a cuatro tampones.
¿Cómo se usan?
Este tipo de braguitas menstruales han sido probadas para cubrir reglas ligeras, medias y abundantes y están diseñadas para ofrecer una protección de unas doce horas. Pero más allá del nivel de absorción, este tipo de lencería nace con el objetivo de promover la sostenibilidad y reducir las toneladas de basura que generan otros métodos menos respetuosos con el medio ambiente. Por esto, también se convierten en la alternativa perfecta para combinarlas con la copa menstrual.
Para no acortar la vida de esta prenda, es importante que tengas en cuenta una serie de indicaciones a la hora de lavarlas. Por un lado, si decides lavarlas a mano, deberás hacerlo con agua fría y con un jabón no demasiado graso para no dañar la tela. En cambio, si decides lavarlas en la lavadora, te aconsejamos que las enjuagues primero con agua fría y después procedas a lavarlas con el resto de la colada a unos 30º y sin suavizante. Para su secado, opta por dejarlas secar al aire.
Estas braguitas han llegado para revolucionar el mundo de la lencería, pero también para hacernos la vida un poco más fácil y con un ahorro considerable, ya que su precio es de 35 euros (unos 760 pesos mexicanos). Un precio que en comparación con el gasto anual que suponen otros productos desechables es mucho menor.