El Instituto Nacional de Antropología e Historia presentó los resultados de la tercera semana de trabajos arqueológicos en Izamal, los cuales permitieron conocer un complejo sistema de túneles para abastecer a la población de agua durante la época prehispánica hasta el siglo XX.
Cabe recordar que a mediados de abril inicio una exploración que dio con indicios de que un cenote está debajo del convento y ahora se descubrió lo que sería una red de túneles que habrían servido para abastecer agua desde ese ojo de agua, hacia los antiguos asentamientos en esa zona.
Los trabajos se realizan alrededor del Convento de San Antonio de Padua, el cual fue el quinto convento construido en Yucatán, y actualmente es el único qué sigue en custodia de los franciscanos pertenecientes a la Provincia Franciscana de San Felipe de Jesús.
El complejo religioso es un monumento histórico propiedad federal y fue edificado entre 1549 y 1561.