Europa superó ayer los 6 millones de casos conocidos de Covid-19, mientras la pandemia vuelve a ganar terreno inexorablemente en el continente europeo a medida que se adentra en el otoño, pero también amenaza a otras regiones como el Caribe, donde hay una “intensa transmisión” del virus, informó la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
En total, 6 millones 940 casos fueron detectados en Europa, de los cuales 237 mil 716 acabaron en deceso, según el recuento de la AFP.
Rusia es el principal país más afectado en términos de contagios, con más de 1.2 millones, mientras que el país con más decesos es Reino Unido, con 42 mil 445. En los últimos siete días, el continente ha registrado 26% de casos más que la semana pasada.
Otros países, como Italia, que hasta el momento ofrecen mejores cifras de contagios y hospitalizaciones, se aplican para no caer en la misma situación. Roma anunció que el cubrebocas será obligatorio en el exterior en todo el país, y prolongará el estado de urgencia hasta finales de enero.
El presidente francés, Emmanuel Macron, advirtió que ante la progresión de la enfermedad, habrá que imponer “más restricciones” en las zonas más afectadas. Francia reportó ayer 18 mil 746 contagios en un día.
Bruselas siguió el ejemplo de París con el cierre de restaurantes y bares.
La situación “es extremadamente compleja y tensa” en la capital belga, indicó el presidente de la región, Rudi Vervoort.
La complejidad no sólo afecta a la situación sanitaria, sino que parece contagiarse a los gobiernos, que hacen malabarismos para imponer nuevas restricciones sin paralizar la economía.
En Escocia los pubs y cafés de cinco regiones no podrán acoger clientes durante poco más de dos semanas. Pero podrán vender bebidas para llevar.
“De transmisión moderada a intensa”
Mientras, Carissa Etienne, directora de la OPS, dijo que “durante los últimos 60 días, 11 países y territorios del Caribe han pasado de una transmisión moderada a intensa, lo cual es algo preocupante a medida que los países reabren el espacio aéreo”.
“Nos preocupan los picos de casos, incluso en lugares que han manejado brotes de manera efectiva, como Cuba y Jamaica”, apuntó durante una rueda de prensa virtual.
Las naciones del Caribe, cuyas economías dependen fuertemente del turismo, reabrieron sus fronteras para viajes no esenciales a partir de julio. Consultado por AFP sobre los “puntos calientes” en esa zona, Sylvain Aldighieri, gerente de incidente para covid-19 de la OPS, dijo que Trinidad y Tobago y Bahamas reportaron “un incremento importante de la trasmisión” desde entonces, subrayando que en este último caso la complejidad es mayor por ser un archipiélago.
“Es un riesgo con el cual los países van a tener que vivir”, dijo Aldighieri sobre el flujo de turistas, que consideró “vital” para su economía.
“No hay una única medida que funcione como una varita mágica”, agregó, aunque llamó a poner el acento en la detección y el rastreo de casos.
Etienne destacó como una “buena noticia” la disminución de las tasas de enfermedad grave por Covid-19 en la región.
Atribuyó este avance a un mayor conocimiento científico del virus aparecido en China a fines del año pasado, y al aumento de las redes de laboratorio, camas de hospital y capacitación de los trabajadores de la salud.
Sin embargo, insistió en la necesidad de seguir usando máscaras y manteniendo un distanciamiento físico de los demás.
El continente americano es la zona del mundo más afectada por la pandemia global declarada en marzo.
Con más de 17 millones de casos y más de 574 mil muertes, concentra la mitad de todos los contagios y más de la mitad de todos los fallecimientos por Covid-19 del planeta. (El Universal)