Más de un centenar de niñas y niños del interior del estado se dieron cita en el Gran Museo del Mundo Maya para participar en el 4.º Encuentro Infantil Multidisciplinario en Lengua Maya, organizado por la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta), como parte del programa Alas y Raíces de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México.
Durante esta jornada, las infancias participaron en talleres de poesía, música, rap, juegos tradicionales y teatro en lengua maya, con el objetivo de fortalecer su identidad y orgullo por sus raíces. Este esfuerzo forma parte de la visión del Renacimiento Maya, que impulsa el Gobierno del Estado para preservar y revitalizar esta lengua entre las nuevas generaciones.
Guiados por artistas como Pat Boy, DJ Rakalkú, Lupita Chan, el tiktoker Santos Tuz, la poeta Daniela Cano Chan y el promotor cultural Fernando Santandreu, de la ludoteca Casa Zarigüeya, las y los participantes exploraron formas creativas de expresión en maya a través del arte, la tecnología y el juego.
El evento reunió a niñas y niños de los municipios de Hoctún, Abalá, Maní, Teabo, Oxkutzcab, Kanasín, Ixil, Mayapán, Cansahcab, Dzoncauich y Mérida.

Durante la inauguración, la titular de la Sedeculta, Patricia Martín Briceño, y el director de Museos y Patrimonio, Fidencio Briceño Chel, destacaron el valor de la lengua maya como una herencia viva que debe ser conocida, hablada y promovida con orgullo.
“En el Renacimiento Maya, tenemos que hacer que la lengua florezca, pero ya no solo nosotros, los mayores, sino a través de ustedes, niñas y niños, y que nos enorgullezca ser lo que somos”, expresó Briceño Chel.
Entre las actividades, se llevaron a cabo talleres como Ut’aan pusiíkal: Palabras del corazón, impartido por Daniela Cano, y A t’aaane’ Kuxaa’an, t’íítbesej: Tu lengua vive, compártela, a cargo de Santos Tuz, donde se exploraron la poesía y las herramientas digitales como medios para el fortalecimiento del maya.
Casa Zarigüeya ofreció dinámicas de juegos corporales, lectura musical y juegos de mesa con temáticas mayas, mientras que el taller Vamos a crear rap ich maya mostró cómo el rap puede ser una poderosa forma de contar las historias de las comunidades, siempre en lengua maya.

Además, las infancias y sus acompañantes recorrieron las salas del museo, incluida la exposición Kili’ich chuuyob: bordados mayas de uso ritual, que destaca la relación entre los textiles tradicionales y lo sagrado.
Para cerrar con broche de oro, el grupo de teatro Titeradas presentó la obra bilingüe maya-español Lo que contaba chichí, que subrayó la importancia de la familia como espacio para la transmisión de saberes, tradiciones y valores culturales.