Gabriela Jauregui presentó su novela “Feral” donde explora la violencia actual y la transforma en un faro sanador para el lector.
En el marco de la Feria Internacional de la Lectura Yucatán (FILEY), Gabriela Jauregui habló sobre cómo a través de la historia de sus personajes: Diana, Saratoga, Yunuén y Eugenia; construye una novela lejana al horror, terror y cinismo, pero con toda la intención de transmitir la problemática del feminicidio desde la ficción como algo que politiza.
“El lenguaje cambia cómo pensamos el mundo, como lo vivimos, percibimos y eso tiene un impacto” expuso, Jauregui, la razón de su obra.
Mencionó que su herramienta más poderosa es el lenguaje, y que la forma en que trabaja es a través de las palabras; por lo tanto, tenía que ser muy cuidadosa con su escritura. “Me tardé mucho escribiendo porque no solo quería contar esa historia, me importaba mucho cómo contarla y desde donde. Bordando cuidadosamente las palabras de estos relatos que duelen tanto” expresó.
Asimismo, la autora comentó que no se trata del feminismo como tal, “eso lo conocemos dolorosamente demasiado bien”. Quería honrar, imaginar y celebrar los actos de hacer comunidad entre mujeres, que posibilitan la vida y que genuinamente hacen una diferencia.
“Quería escribir ficción. Aterrizar todo eso sin que se volviera un ensayo teórico. El lenguaje y las historias que contamos, también posibilitan o imposibilitan los mundos que habitamos” explicó.
Para finalizar, Jauregui invitó a la lectura de su obra, Feral, una novela que se desarrolló durante ocho años, entre las revueltas del feminismo, realidad que ha cambiado completamente a la autora y su escritura.