Investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) estiman que cerca de 50 grandes núcleos habitacionales rodeaban a la milenaria urbe de maya de Chichen Itzá, que estuvieron habitadas por distintas familias y linajes, que construyeron importantes edificios y palacios para sus familias y séquito y que realizaban ceremonias y rituales religiosos.
El núcleo denominado “Serie Inicial’ es el primero complejo urbano que se abrirá al público en 2024, consta de unos 25 edificios que tienen una antigüedad de mil 200 años, algunos de ellos de gran presencia y donde en este momento se realizan trabajos de recuperación, identificación, salvamento y reconfiguración de las edificaciones.
José Osorio León y Francisco Pérez, arqueólogos encargados de los trabajos de intervención en este espacio en el área conocida como «Chichén Viejo», ofrecieron un recorrido para medios de comunicación y destacaron importantes descubrimientos que están siendo estudiados.
En su caso, Osorio León señaló que, ‘la Serie Inicial’ es un polígono ubicado a unos 800 metros al sur del área conocida como ‘Chichén Viejo’, descubierta en 1925 durante la primera intervención de la Institución Carnegie en el Proyecto Chichén Itzá.
Señaló que, intervinieron los investigadores Sylvanus Morley, K.J. Kilmartin, ingeniero del Servicio Geológico de los Estados Unidos y Monroe Amsden, arqueóloga asistente, quienes realizaron las primeras impresiones fotográficas del sitio y a esta zona del sitio se le denominó «Serie Inicial».
Detalló que, durante muchos años permanecieron sin proceso de avance en exploración y excavaciones hasta que, en 2010 se iniciaron los primeros procesos de intervención. Declaró que, Chichen Itzá está próximo a cumplir 100 años de sus primeros procesos de investigación y nunca, se había tomado referencia de los núcleos urbanos del perímetro de la metrópoli.
Expuso que, el investigador estadounidense Peter J. Schmidt, fue quien realizó las ultimas investigaciones en este polígono y producto de ello se conoce mucho más de la presencia de la familia que habitó este núcleo y que según un glifo maya se idetificó como la familia Cupul y como parte de estas investigaciones se publicó el libro “El Templo de los Búhos de Chichén Itzá y su emplazamiento cronológico: una nueva propuesta”.
ijo que, tras diez años de estudios y excavaciones, se ha controlado el gran porcentaje de la ubicación de los edificios, se han identificado frizos y relieves y se avanza en el proceso de identificación, selección de materiales y detalles ornamentales de las construcciones. En este núcleo, sostuvo, se descrubrió la primera tumba, donde fueron identificados 5 personas, con restos humanos quemados, que datan de los años 800 y mil 200 de nuestra era.
Destacó que, ‘la Serie Inicial’ es un polígono con gran presencia arquitectónica, y los especialistas sugieren que, habían cerca de 50 recintos similares en el perímetro del centro ceremonial ya que se han ubicado al menos 100 sacbés que conducen a distintos puntos donde se estima hay nuevas construcciones.
Puntualizó que, la ciudad de Chichen Itzá cubre una superficie aproximada de 30 kilómetros cuadrados, con un estimado de población en su momento de auge de cerca de 80 mil personas, hacia los años 600 al mil 300 de nuestra era.
Osorio León comentó que, los trabajos de recuperación llevan un avance del 70 u 80 por ciento, se han identificado todos los edificios, pero los trabajos de recuperación de los detalles de los monumentos podría durar otra década, argumentó.
Señaló que, ‘la Serie Inicial’ es un complejo amurallado, con una gran entrada con una construcción que asemeja a una gran serpiente que da paso al polígono habitacional donde trabajan aproximadamente 100 personas, entre arqueológos, capataces, obreros y especialistas en conservación, que están realizando las tareas en los diferentes edificios, excavaciones, dibujo y detección de piezas arqueológicas.
Expuso que, los especialistas han dado cuenta de importantes hallazgos como materiales de cerámica, piezas y utencilios de trabajo, flechas de pedernal, piedra y distintos instrumentos utilizados en esos edificios durante su construcción hace 13 siglos. Sin embargo, no se han localizado piedras preciosas u ofrendas importantes, aún y cuando se han identificado sitios funerarios.
Por su parte, Francisco Pérez manifestó que, los especialistas trabajan de manera específica en el edificio denominado el ‘Palacio de los falos’ y ‘los Buhos’ denominados de esa forma por la numerosa presencia de deidades y grabados en pieda que se han hallado en estas construcciones, además de una plazoeltea con la figura de una gran tortuga, chaac moles como testigos en edificios, además de que, las construcciones están orientadas hacia el poniente y norte, en referencia a los dioses de la vida y la resurrección.
La importancia de este polígono añadió, es que las investigaciones realizadas se habían hecho siempre en el centro ceremonial, es decir, en las grandes estructuras de Chichen Itzá y ahora se busca abrir estas nuevas áreas para que la gente conozca cómo vivían, quiénes fueron las familias que gobernaban esta ciudad, en que forma permanecían y la grandeza y presencia de los rituales que se presentan en los edificios, donde hay presencia escultórica del legado de estos grande señores que eran los líderes políticos de la gran ciudad.