Toda la economía mundial sentirá los efectos de la desaceleración del crecimiento y el aumento de la inflación, además de la crisis humanitaria, que causa la invasión rusa en Ucrania, aseveró el secretario ejecutivo de la Sociedad Centroamericana de Investigación y Docencia, Raúl Vela Sosa, durante la conferencia “Guerra y cambios económicos”.
Como parte del XXII Foro “Yucatán y el Sector Externo”, organizado por la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), en el marco de las actividades del Centenario de esta casa de estudios, el experto señaló que Rusia y Ucrania son importantes productores de materias primas, y las perturbaciones han provocado una escalada de los precios mundiales, sobre todo de petróleo y gas natural.
Aparte de las repercusiones mundiales, los países con exposiciones directas por vía del comercio, el turismo o las finanzas soportarán presiones adicionales; las economías que dependen de las importaciones de petróleo registrarán mayores déficits fiscales y comerciales y un aumento de la presión inflacionaria, pero algunos exportadores, como los de Oriente Medio y África, se beneficiarán de los precios más altos.
“A más largo plazo, es posible que la guerra altere fundamentalmente el orden económico y geopolítico mundial, si se produjeran una transformación del comercio de energía, una reconfiguración de las cadenas de abastecimiento y una fragmentación de los sistemas de pagos, y si los países se replantearan la composición de sus tenencias de monedas de reserva”, apuntó.
Asimismo, Vela Sosa señaló que Rusia y Ucrania exportan un tercio del trigo del mundo, lo que plantea el temor a que países como Egipto y Líbano sufran un desabasto, pues dependen de las exportaciones asequibles de ese grano para el pan y otros alimentos básicos.
“Rusia también es un importante productor de potasio, utilizado en fertilizantes; de paladio, crucial para los automóviles, celulares y empastes dentales, y de níquel, utilizado para fabricar acero y baterías de autos”, enumeró.
En cuanto a América Latina, comentó que el volumen de negocios de Rusia con esta región es bajo en comparación con otras del mundo, pero hay ciertos sectores productivos que ya se ven afectados por el conflicto militar.
“Para México el efecto más grande se reflejará en la compra de gas natural, que comenzó a encarecerse al ser poco sustituible y contraerse la oferta como efecto del éxito de las sanciones económicas internacionales a Rusia”, concluyó.