La Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), en colaboración con instituciones estatales y asociaciones civiles, realizará el proyecto, “Vigilancia a los entornos de consumo escolar de Yucatán”, con el propósito de detectar a niñas y niños con sobrepeso y obesidad.
En esta iniciativa participarán los Servicios de Salud del Estado de Yucatán (SSY), el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF-Yucatán), Koox Taani Fundación para el Desarrollo Comunitario y la Inclusión Social, así como la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado de Yucatán (SEGEY).
La directora del Centro de Investigación en Evaluación y Encuesta del Instituto Nacional de Salud Pública, Teresa Shamah Levy, manifestó que con este proyecto se busca brindar recomendaciones a quienes operen, supervisen y regulen el expendio y distribución de alimentos para favorecer una correcta alimentación en la niñez del estado.
Indicó que se trata de una investigación multidisciplinaria en la cual se involucran académicos, investigadores, especialistas en salud y nutrición, así como estudiantes, quienes diseñarán y aplicarán un instrumento para verificar los entornos de consumo escolar.}
Además, recolectarán información confiable, detectarán a las escuelas que cuentan en su cercanía con vendedores ambulantes y realizarán prácticas sustentables de consumo de alimentos.
“Este es un proyecto que durará dos años y medio, ahorita nos encontramos en la primera etapa que consiste en pruebas piloto, diagnóstico e intervenciones comunitarias, se visitarán comunidades para interactuar con la gente en temas de obesidad y sobre peso”, agregó.
En tal sentido, la directora de Nutrición y Enfermedades Crónicas de la SSY, Liliana Fajardo Niquete, dio a conocer las localidades que están incluidas en esta primera prueba que son las escuelas: “Batalla de Puebla”, ubicada en Tekax, y “Eduardo Lizárraga Azarcoya”, en la comisaría de Caucel.
Posteriormente, para la implementación del proyecto se evaluarán 12 escuelas, seis en condición urbana y semiurbana, y seis donde los estudiantes sean maya hablantes.
“Lo interesante de esta investigación es que se realizarán estudios en diferentes escenarios tanto en el interior del estado como en la ciudad, en zonas indígenas, urbanas y semi urbanas, lo que permitirá replicar posteriormente en otras escuelas”, destacó.
Para la fase de implementación, dijo, se iniciará en enero de 2023 con un diagnóstico exploratorio y de evaluación del entorno de consumo escolar en planteles de preescolar, primarias y secundarias públicas de municipios yucatecos.
Después, establecerán los métodos y medios de difusión de los resultados del proyecto para sensibilizar a la comunidad educativa y sociedad sobre la relevancia del diagnóstico y sus resultados.
Por último, se emitirán las recomendaciones necesarias a las autoridades que operan, supervisan y regulan los entornos de consumo escolar.