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Buscan desarrollar una prueba rápida para detectar Rickettsia

 El Centro de Investigaciones Regionales (CIR) “Dr. Hideyo Noguchi” de la UADY trabaja en el desarrollo de una prueba rápida y de bajo costo que permita diagnosticar si una persona está infectada con Rickettsia, enfermedad transmitida por picadura de garrapata o pulga y en algunas ocasiones por piojos. En entrevista, el profesor investigador del Laboratorio de Enfermedades Emergentes y Reemergentes del CIR-UADY, Cesar Lugo Caballero, advirtió que este padecimiento puede tener consecuencias graves si no es atendido de inmediato, ya que en México no es ampliamente conocida y su difusión es poca, incluso a menudo es confundido con el dengue, zika y chinkungunya. “Una vez que infecta al humano entra a las células que cubren los vasos sanguíneos provocando en los primeros días síntomas como dolor de cabeza, fiebre, dolor de cuerpo, entre otros, los cuales son muy parecidos a cualquier tipo de infección”, abundó. En este sentido, señaló que este es el desafío para los servicios de salud pues sus síntomas pueden confundirse y un obstáculo adicional es que los pacientes a menudo no perciben cuando, particularmente, una garrapata les muerde. “La meta del proyecto es lograr una detección lo más rápida posible y a bajo costo, pues suele ser muy costosa y tardada”, puntualizó. El académico recordó que actualmente la Rickettsia se detecta vía PCR, un método que requiere instrumental especializado y personal capacitado, pero que no ofrece resultados inmediatos. “Por el momento, esta prueba de PCR se hace aquí en el laboratorio de enfermedades emergentes y reemergentes, pero los trabajos continúan para lograr obtener una detección rápida”, afirmó. En tal sentido, continuó, la muestra que se quiere desarrollar en dicha estancia sería algo que pudieran tener las y los médicos en su consultorio y que desde el primer contacto con el paciente se haga la determinación. “Pensamos en una prueba ya sea como una tira reactiva o algo similar al manejo de un glucómetro, instrumento que se utiliza para medir el nivel de azúcar, sin embargo, esto va a depender del sistema de detección que se le añada a la molécula que aislamos”, explicó. Resaltó que el diagnóstico es vital, ya que el personal de salud tiene un margen de respuesta muy limitado y el período de incubación es de siete a 14 días, aunque puede ser más corto, lo cual agravaría la infección. Aseveró que los efectos varían de moderados a severos, no obstante, sino se diagnostica oportunamente se agrava e incluso una persona que sobreviva a esta enfermedad puede sufrir secuelas. “En esta temporada de calor aumentan los casos de rickettsiosis, por lo que se exhorta a la población a seguir cuidando su entorno para evitar la existencia de la garrapata, ya que este es el principal vector de contagio”, recalcó. En este estudio también colaboran el Dr. Fernando Puerto Manzano, jefe del laboratorio; la Dra. Karla Dzul Rosado, encargada de llevar a cabo el diagnóstico de Rickettsiosis y el Ing. Henry Noh Pech, auxiliar del laboratorio.

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Estudiante UADY destaca en los primeros lugares en Olimpiada internacional de Física

José Ángel Villegas Pérez, estudiante de la Escuela Preparatoria Uno, obtuvo el segundo lugar en la VII Olimpiada Mesoamericana de Física 2024 tras competir contra más de 60 contrincantes de diversos países. “La verdad sí fue para mi sorprendente el anuncio de que fui uno de los ganadores, porque me di cuenta que todo el esfuerzo de poco más de dos años rindió frutos, recuerdo que en secundaria no me gustaba mucho la física, sin embargo, siempre tuve un compañero exolímpico que me invitaba a sumarme a esta área, fue hasta que llegue la preparatoria que me adentré más”, indicó. Entrevistado en la dirección de este plantel de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), el bachiller detalló que durante esta competencia internacional realizada en modalidad virtual enfrentó a jóvenes de Costa Rica, El Salvador, Honduras, Perú, Colombia, Bolivia y Guatemala. Aunque ha participado en otros torneos estatales y nacionales, obteniendo medallas de oro, bronce y menciones honoríficas, José Ángel aseguró que los nervios nunca se van del todo y por ello agradeció el acompañamiento de sus profesores, entrenadores y familia, pues esto le ha dado la fortaleza para seguir adelante. Recomendó a las y los jóvenes que deben perderle el miedo a la física porque “es básicamente el motor del mundo, nos permite entender cómo funcionan las cosas”, por ello aseguró que buscará motivar a más estudiantes para que se adentren en este mundo, así como lo hicieron con él. Si bien ya concluye su etapa en preparatoria, afirmó que continuará trabajando para seguir participando en este tipo de competencias o ayudar a otros alumnos a que logren estar en certámenes nacionales e internacionales. En su turno, el profesor del área de ciencias naturales de la Preparatoria Uno, David González, precisó que, para poder llegar a este nivel, las y los jóvenes llevan un proceso de preparación cercano a tres años, desde que son seleccionados y capacitados durante seis meses en la misma escuela para poder participar en la fase estatal. Posteriormente dijo, continúan en entrenamiento por un tiempo más para poder representar a Yucatán a nivel nacional y así hasta poder representar no solo a su estado, sino a su país. “Toda esa preparación que recibió le permitió ser seleccionado para participar en esta competencia internacional, no es abierta a todos, deben ser jóvenes que tengan toda esta trayectoria, que cuenten con la recomendación de la Sociedad Mexicana de Física, él cumplía con todo el perfil y tuvo un desempeño importante”, resaltó. El docente destacó que este es el cuarto año consecutivo que algún estudiante de esta escuela de la UADY participa en un certamen internacional y obtiene una medalla: en 2021 fue la Olimpiada Iberoamericana en Brasil; en 2022 otro concursó en la Olimpiada Internacional en Suecia; y para 2023 otro fue a la Olimpiada Europea de Física en Alemania y fue seleccionado para participar en Japón. Lo anterior, continuó, demuestra el nivel educativo que tiene este plantel educativo, pero sobre todo el compromiso, dedicación y conocimientos de las y los bachilleres, ya que de manera voluntaria dedican horas adicionales a sus clases para poder prepararse y capacitarse en esta rama del conocimiento. Finalmente, el director de la Preparatoria Uno, Carlos Rosas Espadas, felicitó al alumno galardonado y reconoció el trabajo realizado por cada uno de los profesores y entrenadores que día con día trabajan en conjunto con los seleccionados para que puedan incrementar sus conocimientos y capacidades. Manifestó que desde esta escuela siempre van a apoyar a las y los jóvenes para que puedan continuar obteniendo este tipo de reconocimientos.

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Destaca colaboración de la UADY en investigación de rituales mayas en Chichen Itzá

 La Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) se coloca nuevamente como referente en materia de colaboración e investigación internacional, gracias a la participación que tuvieron académicos de esta casa de estudios en el proyecto interinstitucional “Genomas antiguos mayas revelan secretos de los sacrificios rituales en Chichén Itzá”. El profesor investigador de la Facultad de Química de la UADY, Julio César Lara Riegos, detalló que, de manera conjunta, trabajaron con el doctor Rodrigo Barquera en este estudio que mediante pruebas genómicas permitió determinar que un chultún (cisterna maya) ubicado en la parte norte de El Castillo fueron enterrados al menos 100 menores de entre los 4 y 7 años. “Se realizó un análisis genético en 64 de las osamentas encontradas, lo que nos permitió determinar que los menores procedían de poblaciones mayas y al menos una cuarta parte estaban estrechamente relacionados con otro menor. Además, se determinó también que ellos habían consumido dietas similares, por lo que hay una posibilidad de que fueran criados contextos similares”, explicó en entrevista. Como parte de los trabajos de la UADY, relató que se realizó una labor de socialización con habitantes de Tixcacalcupul, donde se tuvo la colaboración voluntaria de 68 habitantes para que se realizarán estudios genómicos, con el fin de realizar una comparativa entre estas osamentas y los mayas actuales. Con este análisis comparativo dijo, se identificó que existen huellas o rastros en el genoma de los pobladores actuales, sobre todo en materia inmunológica, que permite ver una posible adaptación a procesos de epidemias que hubo en el periodo de La Conquista y que permite tener un tipo de resistencia a microorganismos como la salmonela. “Yo me dedico a hacer investigación bioquímica en nuestra población en riesgo cardiovascular, por ello me interesaba mucho hacer este estudio comparativo. Gracias a ello, detectamos que a lo largo de los años los habitantes mayas han tenido cambios en el metabolismo de lípidos con el fin de adaptarse al medio específico donde viven, además, confirmamos que existe la continuidad de los antiguos pobladores de Chichén Itzá en el genoma de los habitantes actuales.”, detalló. Lara Riegos destacó todos estos descubrimientos y agradeció la colaboración de los habitantes de dicha población que siempre se mostraron dispuestos a colaborar, con el fin de conocer un poco más de su historia; luego de obtener los resultados, precisó, se realizaron actividades de socialización para que ellos conocieran también las conclusiones. Además, continuó, en este trabajo también participaron Julio Torres y Ermilia Moo, profesores de la Facultad de Química y de la Licenciatura de Trabajo Social de la Facultad de Enfermería, respectivamente, al igual que la colaboración de la Unidad de Proyectos Sociales a cargo de Margarita Zarco Zalgado. “En colaboración fuimos e interactuamos con la gente, platicamos con ellos para conocer qué significaba toda esta información, la verdad fue un trabajo enriquecedor, un aporte multidisciplinario ya que contamos con el apoyo de otras áreas de la Universidad que hicieron posible el poder obtener todos estos resultados”, finalizó.

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Niños y gemelos eran sacrificados en Chichén Itzá, revela estudio de genomas antiguos

Mediante análisis genéticos se ha descubierto que en la antigua ciudad maya de Chichén Itzá se practicaba el sacrificio ritual de infantes, centrado exclusivamente en varones. Se trata de una investigación realizada por un equipo interdisciplinario, liderado por Rodrigo Barquera Lozano, del Departamento de Arqueogenética del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva (MPI-EVA, por sus siglas en inglés), en Leipzig, Alemania, en el que participaron cuatro especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Entre otros resultados del estudio, dado a conocer esta mañana en la revista científica Nature, está la identificación, en un acervo óseo bajo resguardo del Centro INAH Yucatán, de estrechas relaciones de parentesco de los niños inmolados, incluida la de dos pares de gemelos idénticos. Lo anterior sugiere una conexión de las prácticas sacrificiales con los mitos del origen del Popol Vuh, toda vez que, en la cosmovisión maya y mesoamericana en general, los gemelos representan cualidades de dualidad entre las deidades y los héroes. Esta es, además, la primera ocasión en la que se identifican a mellizos en contextos funerarios mayas de la antigüedad. El artículo coescrito por Rodrigo Barquera, quien también es académico de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH); Víctor Acuña Alonzo, titular de esta casa de estudios; Oana del Castillo Chávez, investigadora del Centro INAH Yucatán, y Diana Iraíz Hernández Zaragoza, alumna del Laboratorio de Genética Molecular de la ENAH, entre otros especialistas, abunda en la temática del sacrificio infantil y el uso ceremonial de cuevas y otros espacios naturales por los mayas precolombinos. El grupo de científicos llevó a cabo sus indagaciones en el Laboratorio de Arqueogenética del MPI-EVA y se concentró en los restos de 64 infantes, cuyos restos óseos fueron descubiertos en 1967, dentro de una cámara subterránea localizada 300 metros al noreste del Cenote Sagrado de Chichén Itzá. El artículo explica que este espacio naturalmente formado pudo ser usado como un chultún –depósitos creados por los mayas para el almacenamiento de agua– y ampliado para conectarlo con una pequeña caverna. Del osario, que de manera general contenía más de un centenar de esqueletos, se seleccionaron 64 individuos, determinados a partir de sus cráneos, en específico de porciones de sus huesos temporales izquierdos. “Para comprender mejor el origen y las relaciones biológicas de los niños sacrificados, así como su relación con los habitantes actuales de la región, utilizamos un enfoque combinado de bioarqueología y genómica para investigar los 64 subadultos enterrados dentro del chultún, y compararlos con 68 habitantes mayas actuales del pueblo Tixcacaltuyub, cercano a Chichén Itzá, así como con otros datos genéticos antiguos y contemporáneos disponibles de la región”, explicó Rodrigo Barquera. El análisis de datos genéticos reveló que todos los individuos del chultún eran varones de entre tres y seis años de edad, y que en el entierro masivo estaban presentes parientes cercanos (hermanos/primos), incluidos dos pares de gemelos monocigóticos. Una exploración genética más detallada mostró igualmente que, al menos una cuarta parte de los niños, estaban estrechamente relacionados entre sí. “Los resultados nos indican que los niños estaban siendo seleccionados en parejas para actividades rituales asociadas con el chultún”, refirió Oana del Castillo. De acuerdo con la antropóloga física, “las edades de los niños varones, su estrecha relación genética y el hecho de que fueron enterrados en el mismo lugar, el cual fue usado con fines mortuorios durante más de 500 años, permiten repensar a este chultún como un espacio de entierro postsacrificial”, toda vez que, detalló, el sitio preciso en donde se realizaba el proceso de sacrificio, aún es desconocido. La datación de los restos reveló que el chultún fue utilizado con fines mortuorios entre los siglos VII y XII, pero que la mayoría de los niños fueron enterrados durante el periodo de 200 años del apogeo político de Chichén Itzá, entre los años 800 y 1000 d.C. Por otra parte, a partir del análisis de isótopos estables de carbono y nitrógeno del colágeno óseo, se encontró que estos jóvenes parientes habían consumido dietas similares, lo que sugiere que fueron criados en la misma zona y, posiblemente, bajo los mismos accesos a recursos y costumbres alimentarias. La citada comparativa entre ADN antiguo y contemporáneo evidencia una continuidad genética en la región maya; por otro lado, hace notar la valía de los mencionados estudios para generar nuevas líneas de investigación en otros sitios prehispánicos y temporalidades, refirió Oana del Castillo. Cabe destacar que la comunidad de Tixcacaltuyub ha colaborado con el equipo de investigación durante muchos años, y sus perspectivas y preguntas fueron tomadas en cuenta para el desarrollo del artículo científico. El director de la ENAH y experto en genética antropológica, Víctor Acuña, concluyó: “Este trabajo representa un avance significativo en nuestra comprensión de las prácticas rituales de los antiguos mayas, así como de diversos procesos de cambio biológico y cultural. Los hallazgos son particularmente relevantes para la ENAH, ya que nuestra institución, adscrita al INAH y la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, tiene un fuerte compromiso con la investigación y la divulgación del conocimiento sobre las culturas mesoamericanas. “El estudio refuerza la importancia del ADN antiguo para comprender el pasado y abre nuevas vías de investigación sobre la sociedad y la cultura maya. Como director de la ENAH, me siento orgulloso de que nuestra institución esté involucrada en investigaciones de vanguardia que amplían el conocimiento sobre el pasado prehispánico de México”, finalizó.

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Descubren nueva especie de dinosaurio carnívoro en Argentina

En los últimos años, la Patagonia ha sido una fuente inagotable de descubrimientos de dinosaurios. Desde los enormes saurópodos como el Titanomachya gimenezi o el Patagotitan mayorum, hasta los temibles carnívoros como el Taurovenator violantei, Aoniraptor libertatem, y Tralkasaurus cuyi. A esta lista se suma ahora una nueva especie recientemente descubierta: el Koleken inakayali. El Koleken inakayali fue un carnívoro que vivió hace 69 millones de años y pertenece a la familia de los Abelisauridae, siendo un pariente cercano del Carnotaurus, aunque sin los cuernos sobre las órbitas característicos de este último. El nombre de este dinosaurio proviene del idioma tehuelche, de un pueblo originario de la Patagonia, y significa “el que viene de las arcillas y el agua” mientras que Inakayali hace referencia a un cacique de este pueblo. El maestro René Hernández Rivera, del Instituto de Geología de la UNAM, proporcionó más detalles sobre el hallazgo y la importancia de este descubrimiento que fue financiado por la National Geographic Society y en el cual participaron más de 70 investigadores y becarios del CONICET del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet). Hernández Rivera comentó que este hallazgo es “considerable, ya que se encontró un esqueleto parcial del dinosaurio, con varios fósiles craneales, restos de su cadera, su cola y sus patas. Usualmente, si bien te va, encuentras el cráneo o el esqueleto, pero no ambos”. Destacó además que este descubrimiento subraya que aún hay un gran número de especies de dinosaurios por descubrir y que la paleontología sigue siendo relevante. El experto del Instituto de Geología indicó que el Koleken inakayali era pequeño en comparación con el Carnotaurus y que tenía brazos muy pequeños. Al ser cuestionado sobre por qué este y otros carnívoros tenían esta peculiar característica, respondió que en paleontología hay varias teorías para explicarlo. “Este carnívoro tenía brazos muy pequeños, incluso más que los del T-Rex. Aún no definimos el motivo de esa característica peculiar, pero manejamos diversas teorías: que les ayudaban a correr más ágilmente, que los mantenían erguidos o que no eran útiles para nada. Pero aún seguimos estudiando el motivo”, explicó. Diego Pol, quien ha liderado la investigación, indicó que el descubrimiento del Koleken inakayali sugiere que hubo una gran diversidad de carnívoros que compartían el mismo ecosistema. Hernández Rivera coincidió y señaló que los dinosaurios tenían comportamientos similares a ciertos animales actuales. “Durante mucho tiempo se pensó que el T-Rex era un gran depredador, luego se dijo que era carroñero y ahora se cree que era un poco de ambos. El comportamiento de ese dinosaurio es similar al de los carnívoros actuales como los leones o hienas: comen lo que tienen al alcance. Así que la convivencia entre dos o más depredadores en un ecosistema no es tan alejada de la realidad. Sabemos que hubo dinosaurios que iban en manadas u otros que cazaban de manera grupal. Es una probabilidad que no se puede descartar”, indicó. Aunque faltan por confirmar algunos detalles del Koleken inakayali, Hernández Rivera infirió que es muy probable que cazaran en manada, ya que en la Patagonia se han encontrado herbívoros de gran tamaño que difícilmente podrían ser cazados de manera individual. “El gigantismo en los herbívoros de la Patagonia aún no se explica de forma definitiva. Una de las razones es que esto ocurrió como un método de defensa. A mayor tamaño, mayor dificultad para ser cazados. Es probable que el Koleken cazara en grupo y que atacaran ejemplares viejos o jóvenes, algo en lo que necesariamente varios tenían que participar”, expresó. Finalmente, el profesor comentó que la paleontología sigue siendo muy vasta y trascendente, ya que descubrir un fósil, sea cual sea, es como añadir una hoja más al libro de la historia de la vida en la Tierra. El Koleken inakayali seguramente nos ayudará a entender mejor los procesos evolutivos que estos seres extintos llevaron a cabo para alcanzar su máximo esplendor. Revista Global UNAM

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Desarrollan los primeros “árboles líquidos”

Compuestos por fotobiorreactores que utilizan microalgas para eliminar el dióxido de carbono (CO2), científicos argentinos de Y-TEC, organismo formado por YPF y el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), en colaboración con el Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Biotecnología (INBIOTEC); desarrollaron los primeros dispositivos Y-ALGAE, “árboles líquidos” capaces de ayudar en la producción de oxígeno en zonas urbanas. El proyecto, pionero en Sudamérica, cuenta con mecanismos capaces de capturar cerca de media tonelada de dióxido de carbono al año. Dicha cantidad equivale a la capacidad de purificación de aire de entre 10 y 50 árboles. Ya que las microalgas –extraídas del sudeste de la provincia de Buenos Aires– tienen la capacidad de realizar la fotosíntesis, convierten el CO2 en oxígeno y biomasa. “El proceso de fotosíntesis sucede dentro del dispositivo, ahí sembramos las microalgas, junto a algunas soluciones que le ayudan a crecer. Cuando la pantalla del dispositivo Y-ALGAE pasa de un color verde claro a una coloración verde oscura, significa que el dióxido de carbono fue capturado y convertido a un nuevo individuo de microalga”, detalló Sara Medina, técnica y coordinadora del proyecto Y-ALGAE, en una entrevista exclusiva para National Geographic En Español. Además, los expertos buscan favorecer la economía circular, pues utilizarán aguas industriales para el funcionamiento del equipo. Asimismo, aprovecharán los residuos de biomasa para la producción de fertilizantes. En cuanto a los prototipos Y-ALGAE que ya se encuentran en funcionamiento –uno en la estación de servicio YTP y otro en una planta industrial. Cabe destacar que estos surgen en paralelo al LIQUID3, un fotobiorreactor creado por el Dr. Ivan Spasojevic, especialista en Ciencias Biofísicas de la Universidad de Belgrado. Dicho artefacto también intenta reducir los altos niveles de contaminación en Serbia desde 2023. «Existen varias iniciativas a nivel mundial, cada una con sus microalgas locales que están condicionadas a su respectiva zona geográfica. El desarrollo de Y-ALGAE comenzó con el CONICET en 2009 y, en 2019, empezamos el proceso de escalado junto a INBIOTEC para hacer estos prototipos. Actualmente, estamos haciendo un plan para instalar más unidades por toda Argentina«, compartió, María Elena Oneto, líder de la Misión Ambiente de Y-TEC. Si bien los fotobiorreactores nunca sustituirán a los árboles, el proyecto Y-ALGAE, que se concibió bajo un concepto de sostenibilidad alternativa para entornos que poseen un espacio limitado debido a la urbanización, representa un paso significativo en la concientización y lucha contra el cambio climático, a la vez que es un modelo a seguir para otras ciudades del mundo. De National Geographic en Español

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Estudian en Yucatán la viabilidad de arrecifes artificiales en el Caribe mexicano

-Con esta alternativa se busca conservar los arrecifes de coral  Los arrecifes artificiales podrían ser una alternativa como hábitat y espacio de refugio y alimento de cientos de especies marinas, esto, ante el gran estrés y deterioro que sufren los arrecifes de coral en la actualidad, ocasionado por el incremento de la temperatura y el nivel medio del mar; el aumento de la contaminación del agua por actividades turísticas o por los efectos por el cambio de uso de suelo de la zona costera; el crecimiento de la mancha urbana. Estos ecosistemas también se ven afectados por la presencia de especies invasoras; y por el impacto de enfermedades en los corales tales como el síndrome blanco y el blanqueamiento de coral. El Dr. José Adán Caballero Vázquez y el M.C. Jorge Carlos Peniche Pérez, investigador y técnico de la Unidad de Ciencias del Agua del CICY, respectivamente, explicaron que recientemente se obtuvo información valiosa respecto al papel ecológico que tienen los arrecifes artificiales, esto a través de la tesis de maestría «Evaluación de la ictiofauna asociada a arrecifes artificiales en el Parque Nacional Costa Occidental de Isla Mujeres, Punta Cancún y Punta Nizuc, Quintana Roo», por la M. C. Jazmín González Reyes. En el estudio se analizó la diversidad de peces asociada a cuatro tipos de arrecifes artificiales instalados en el sitio de estudio, específicamente, los arrecifes «Reef Ball», «Sitio de vivero de arrecifes», «Las esculturas del Museo Subacuático (MUSA)» y «Los barcos hundidos». Igualmente, se estudió la eficiencia de estas estructuras como arrecifes artificiales desde el punto de vista ecológico, comparando entre los cuatro tipos de arrecifes, cuáles presentan mayor complejidad y oquedades, lo que permite mayor disponibilidad de espacio susceptible de ser ocupado por los peces arrecifales y comparar con la biodiversidad asociada de un arrecife natural adyacente. Al concluir la investigación, se registraron más de 6 mil organismos en 98 especies de peces en los arrecifes artificiales, un número bastante bueno, considerando que en la región se tiene un registro de poco más de 200 especies de las 574 presentes registradas para el Caribe mexicano, incluyendo especies crípticas y sedentarias. Detalló que las familias de peces mejor representadas durante el estudio fueron: los Lábridos (doncellas o señoritas), de importancia para el ecosistema; los Hemúlidos, también conocidos como roncos o burros, que tienen importancia comercial: los Pomacéntridos o damiselas, peces territoriales; y los pargos (familia Lutjanidae), especies también de importancia comercial. En este sentido, el Dr. Caballero Vázquez explicó que, derivado de los resultados del trabajo, los arrecifes artificiales si cumplen un papel importante como hábitat, determinando que las especies usan los arrecifes artificiales como zona de protección, por lo que son una alternativa viable para aminorar los impactos que la actividad turística, el buceo y las personas bañistas en general tienen sobre estos ecosistemas naturales. Mayor uso de los arrecifes artificiales permitiría proteger los arrecifes naturales, considerando que los arrecifes de coral, apenas representan el 1 por ciento del total del océano, son el hogar de una cuarta parte de toda la fauna marina del mundo. Finalmente, indicó que estos modelos de arrecifes artificiales podrían ser viables y replicarse en otras áreas como el Golfo de México, por ejemplo, pero siempre apegados a la legislación y normatividad vigente a fin de no alterar los ambientes marinos. “Estos arrecifes artificiales ayudan a establecer nuevos hábitats y, eventualmente, se convertirán en arrecifes vivos, pero es indispensable que para su instalación se deban realizar estudios de impacto ambiental en la zona y cumplir con la normatividad para evitar daños al sitio”, aseguró.

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UADY acerca la ciencia y la tecnología a pequeños de primaria

La Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) concluyó con éxito su participación en el programa piloto de la Secretaría de Educación Pública (SEP) “Niñas y Niños STEM”, mediante el cual acercaron actividades relacionadas con Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas a 60 menores de una escuela primaria en Mérida. La titular del Programa STEM de la Coordinación General de Posgrado e Investigación de la UADY, Carmen Diaz Novelo, detalló que, entre febrero y mayo de este año, se realizaron 10 actividades con los estudiantes de sexto año de dicho nivel educativo con temas como Explorando Física y Química, Robótica, Lo increíble del cuerpo humano, Circuitos Eléctricos e Ingeniería Mecatrónica, entre otros. Además, a invitación del rector de la UADY, Carlos Alberto Estrada Pinto, acudieron a la Facultad de Ingeniería donde visitaron los laboratorios de Física, Mecatrónica, Energías Renovables y la Estación Meteorológica. “Fueron sesiones muy bonitas, se realizaron distintas actividades con el fin de mostrarles todas las opciones, sin duda entre las sesiones más llamativas estuvieron las de robótica donde hicieron una mano que se podía mover, además de la ingeniería mecatrónica, ahí hicieron un carro que se movía con una hélice y un motor”, explicó. Díaz Novelo detalló que para esta primera edición se contó con la colaboración de 14 estudiantes de la mencionada Facultad, quienes colaboraron en cada una de las jornadas. Puntualizó que una vez concluido, estos jóvenes compartieron su experiencia y alegría porque lograron que las y los pequeños se interesen por alguna de las licenciaturas STEM. “Al platicar con los mentores que participaron pude notar su alegría y satisfacción, pues me contaron que las y los niños platicaban con ellos que de grandes querían ser ingenieros, dedicarse a hacer robots o algo relacionado con la tecnología, ahí nos dimos cuenta que todo valió la pena porque estamos logrando que los niños volteen a ver esta rama”, resaltó. Señaló que, si bien este programa se realizó con el fin de que el alumnado de educación básica pudiera participar, el objetivo principal es cerrar la brecha de género e incentivar principalmente a las niñas a cursar este tipo de carreras profesionales que regularmente se piensa que son para hombres. Finalmente, la coordinadora recordó que la UADY formó parte de las seis Instituciones de Educación Superior que fueron seleccionadas en todo el país para ejecutar esta fase piloto del programa Niñas y Niños STEM, que pertenece a la SEP y se realiza con apoyo de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior y la Fundación Educación Superior Empresa (ANUIES-FESE). Sugirió que la UADY podría replicar este programa de manera permanente para acercarlo a más escuelas de educación básica, sin embargo, esta decisión depende de las autoridades federales.

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Científicos mexicanos desarrollan nuevas tecnologías contra la diabetes

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut), en 2022 más de 14 millones de personas padecían diabetes mellitus en México; esta enfermedad se clasifica en tipo 1, presente en la infancia, juventud o durante el embarazo y tipo 2, más común en personas adultas, que de no controlarse de forma adecuada resulta mortal. En un esfuerzo por diseñar herramientas tecnológicas con base en el análisis de datos, aprendizaje automático e inteligencia artificial como una forma de medicina de precisión, que permitan a los profesionales de la salud establecer mejores pronósticos, diagnósticos y tratamientos, un grupo de investigación del Cinvestav Tamaulipas emprendió un estudio basado en aprendizaje automático para la clasificación de los subtipos de diabetes mellitus. El estudio consistió en el procesamiento de información obtenidos de Ensanut, realizada en México, y de otra similar aplicada en Estados Unidos, denominada Nhanes, las cuales contienen datos públicos de encuestas de salud. Al principio se realizó un análisis descriptivo sobre distintos parámetros de las y los pacientes, como niveles de lípidos, glucosa, estilo de vida, alimentación o actividad física, entre otros, para así determinar su tipo de diabetes. Sin embargo, dentro de la diabetes tipo 2 (la más predominante en el país con el 66 por ciento de casos), a nivel internacional se identifican otros subgrupos que se encuentran asociados a las características de vida del paciente: el primero, se caracteriza por la incapacidad del paciente para absorber insulina; el segundo, por la resistencia a ella; el tercero, por obesidad; y el cuarto, por edad. Al identificar esos subgrupos en la población mexicana fue posible caracterizarlos y validarlos en el país. “Clasificar al paciente de diabetes mellitus de acuerdo a su tipo y al subgrupo al que pertenece, de manera precisa, le ayuda al médico a establecer un mejor pronóstico, diagnóstico y tratamiento, porque el análisis automático de datos le permite hacer una valoración más justificada y mejorar la perspectiva en su calidad de vida”, explicó José Luis González Compeán, líder del equipo de investigación. Cada uno de estos subgrupos presenta distintos riesgos o complicaciones y, por lo tanto, se deben atender de manera diferenciada, de ahí que la investigación internacional propone identificar cuáles son las terapéuticas más idóneas para cada subtipo, porque en ocasiones se asume que todas las personas enfermas de diabetes tienen las mismas características y por ello les aplican un solo tratamiento, con medicamentos iguales, cuando la evidencia en los datos indica que no debe ser así. Con información pública real se caracterizó cómo se manifiestan estos subgrupos de diabéticos y diabéticas en la población mexicana, empleando diversas herramientas de análisis de datos y estadística que resultó en un sistema, prácticamente un robot de software, que al procesar los datos sugiere al médico o la médica, un pronóstico más preciso basado en evidencia. “El reto del estudio, publicado en la revista BioData Mining, fue conjuntar instrumentos de cómputo como análisis de grandes volúmenes de datos, técnicas estadísticas, algoritmos de aprendizaje automático comprobados en la literatura científica y cómputo de alto desempeño”, sostuvo Iván López Arévalo, miembro del equipo científico. El sistema que propone la investigación para la clasificación de los subgrupos de la diabetes mellitus tipo 2 en México se deriva de la plataforma tecnológica de servicios en la nube Muyal (diseñada por las y los investigadores en Cinvestav Tamaulipas) para gestión, aseguramiento, intercambio, procesamiento y preservación de grandes volúmenes de indicadores médicos, cuyo propósito es crear un repositorio nacional de análisis de datos de e-salud para la toma de decisiones o asistencia en el diagnóstico. La investigación ofrece un sistema de información y análisis, ya disponible para varios dominios (cáncer, mortalidad y contaminantes, entre otros), para atender un problema de salud concreto, como diabetes u otras enfermedades; su uso no requiere de conocimientos especializados de programación o de una infraestructura de cómputo sofisticada y su consulta es similar a la de los buscadores web en línea. “Una virtud del sistema es su facilidad de uso, la información que ofrece puede ser una gráfica interactiva para emplearse para diversos aspectos, tales como en la distribución de fármacos en una zona determinada, identificar en un mapa la concentración de casos, por ejemplo, o tablas de clasificación que sirven a los profesionales de la salud en tomar mejores decisiones”, aseguró José Luis González Compeán.

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¿Cuáles son los efectos de una ola de calor en la salud?

Si bien las olas de calor no generan daños evidentes como otras amenazas naturales, tales como los huracanes o inundaciones, pueden causar mortalidad y morbilidad, señala la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Entre sus efectos se encuentra un agravamiento de enfermedades cardiopulmonares y renales. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Meteorológica Mundial (OMM), no hay un consenso en la definición de ola de calor. Asimismo, ambas entidades coinciden en que consiste en un periodo inusualmente caliente, seco o húmedo, de día o de noche, que se inicia y termina de forma abrupta. Además, las olas de calor tienen una duración mínima de dos o tres días y se percibe su impacto tanto en los seres humanos como en los sistemas naturales. El aumento de las temperaturas genera un mecanismo de respuesta fisiológico del cuerpo humano que se traduce en la vasodilatación periférica y el sudor. Por un lado, se activa el transporte masivo de sangre a la periferia del cuerpo para facilitar su enfriamiento lo que, consecuentemente, ocasiona una sobrecarga del sistema cardiovascular. Por otro lado, se genera la sudoración excesiva que puede provocar la pérdida masiva de líquidos y electrolitos, explica la OPS. De qué manera la ola de calor afecta a la salud Las olas de calor pueden generar perjuicios en la salud. No obstante, la escala y naturaleza de los efectos dependen del tiempo, intensidad y duración del evento térmico, así como de otros factores como la adaptación de la población local, la infraestructura y el equipamiento disponible, aclara la organización panamericana. Concretamente, el organismo señala que la exposición al calor puede causar edema (hinchazón causada por el exceso de líquido en los tejidos), síncope (pérdida súbita de la conciencia), calambres, dolor de cabeza, irritabilidad y agotamiento. Además, el calor extremo puede generar deshidratación severa, accidentes cerebrovasculares y contribuir a la generación de coágulos. La entidad sanitaria aclara que pocas muertes son causadas directamente por el calor, sino que la mayoría de los decesos se debe al agravamiento de enfermedades cardiopulmonares, renales, y psiquiátricas. Sumado a esto, existen otras consecuencias indirectas. Por ejemplo, los países que se ven afectados por el aumento de las temperaturas suelen registrar falta de agua para consumo (por sequía o fallas en el bombeo) o desabastecimiento de alimentos frescos y pérdida de vacunas (por ruptura de la cadena de frío y cierre de los sitios de venta). Cómo prevenir los efectos de las olas de calor La OPS advierte que la respuesta al calor depende de la capacidad de adaptación de cada persona. No obstante, aclara que los efectos graves pueden aparecer de manera repentina, por lo cual se recomienda estar alerta a las recomendaciones de las autoridades locales. Asimismo, el organismo brinda sugerencias a tener en cuenta para prevenir las consecuencias en la salud: Evitar la exposición al sol durante las horas de mayor calor. No dejar a niños o ancianos desatendidos en vehículos estacionados. Evitar hacer ejercicio o actividades intensas al aire libre sin protección.Consumir agua cada 2 horas, aún sin tener sed. Tomar duchas o baños fríos en sitios seguros. Mantener la vivienda fresca cubriendo las ventanas durante el día y usando aire acondicionado o ventilador en las horas de más calor. Ante la presencia de síntomas, consultar con un médico.