Las reservas ecológicas, como es el caso de “Cuxtal”, brindan importantes servicios ambientales que benefician tanto a los ecosistemas forestales como al ser humano y de ahí la importancia de conocer más sobre esos servicios y las actividades para su cuidado y conservación, aseguró Claudio Franco Chulín, especialista de la Comisión Nacional Forestal.
Indicó que dentro de los objetivos del programa institucional de la Conafor 2020-2024, se establece conservar y restaurar la capacidad de provisión de servicios ecosistémicos de áreas forestales estratégicas, mediante un enfoque incluyente y participativo que contribuya a garantizar un medio ambiente sano para el desarrollo y bienestar de la población.
Detalló que los servicios ambientales de provisión, incluyen bienes tangibles como alimentos, madera, fibras; los de regulación se refieren a procesos de regulación climática, control de la erosión; los culturales que son los bienes intangibles asociados a valores estéticos o religiosos, y finalmente, soporte, que es la productividad primaria y conservación de la biodiversidad.
“Los servicios de provisión o culturales se dan cuando diferentes grupos locales utilizan productos obtenidos de ecosistemas para responder a necesidades diversas como alimentación, construcción de viviendas o medicinas, además que hay grupos que atribuyen valores y sentido religioso a sitios que dependen de condiciones ambientales específicas”, precisó.
El especialista abundó que algunos ejemplos de servicios ambientales son la regulación climática, purificación del agua, conformación del suelo, el paisaje (en términos de un valor estético, cultural o educativo) y la protección contra eventos como huracanes y tormentas, entre otros.
En cuanto a los servicios que ofrece la Reserva Cuxtal, puntualizó que la cubierta vegetal, caracterizada por la fisonomía de la vegetación, sus formas de vida dominantes, altura, densidad y la composición de las comunidades de plantas, entre otras, son expresiones de la influencia de los factores ambientales, clima, geomorfología, suelos, regímenes de perturbación e influencia humana, en la configuración del paisaje.
“La vegetación influye a su vez, a través de interacciones biofísicas, en las condiciones del clima y en la formación de suelos, en las condiciones del hábitat de la fauna silvestre y la biota del suelo, y también en la disponibilidad de recursos y la generación de servicios ecosistémicos de los cuales dependen las sociedades humanas“, abundó.
Indicó que de acuerdo con los datos del Inventario Estatal Forestal y de Suelos Yucatán 2013, y con base al Marco Geoestadístico Municipal 2010, la formación forestal en el Municipio de Mérida corresponde a la de selvas (también llamados bosques tropicales) medianas con 21.0 %, las selvas bajas representan 33 %, ambas formaciones de tipo forestal son secundarias y representan el 54 %, y otras áreas no forestales con 46 %.
En la Reserva “Cuxtal”, precisó, esta formación sólo está representada por la selva mediana caducifolia, la cual se describe a continuación:
Los árboles tienen una altura de 10 a 20 metros aproximadamente, y dejan caer sus hojas de 50 a 75 % durante la época seca del año, esto hace que los suelos donde prosperan formen una capa esponjosa de hojarasca; la pedregosidad es también otra propiedad del suelo, la cual es un factor que propicia el establecimiento de este tipo de vegetación.
Las especies arbóreas registradas con mayor frecuencia en esta comunidad son las siguientes: Piscidia piscipula, Bursera simaruba, Lysiloma latisiliquum, Pithecellobium albicans, Lonchocarpus xuul, Caesalpinia gaumeri, Acacia gaumeri, Thouinia paucidentata y Gymnopodium floribundum, según el censo INEGI 2009.
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