Un equipo internacional de investigadores ha documentado el comportamiento de un orangután macho de Sumatra llamado Rakus, quien se observó aplicando repetidamente jugos de hojas de la planta trepadora Akar Kuning en una herida abierta en su cara. Los científicos dicen que este podría ser el primer registro de un animal distinto de los humanos que usa deliberadamente una planta medicinal para tratar una herida.
Este comportamiento, observado en el Parque Nacional Gunung Leuser en Indonesia, parece ser un caso de automedicación por parte del orangután para tratar su lesión. El análisis químico de la planta reveló propiedades útiles para la cicatrización de heridas, incluyendo propiedades antibacterianas, antiinflamatorias y antioxidantes.
Los investigadores sugieren que Rakus podría haber descubierto el alivio del dolor de manera incidental al consumir la planta o haber aprendido la técnica de tratamiento de heridas. Aunque este comportamiento no se había observado antes en grupos locales de orangutanes, los investigadores creen que Rakus pudo haber aprendido este ingenioso truco de la población en la que nació.
«Sólo unos días después de este tratamiento, la terrible herida comenzó a sanar y en un par de días se había cerrado por completo», menciona la autora principal Isabelle Laumer, bióloga cognitiva y primatóloga del Instituto Max Planck de Comportamiento Animal en Alemania. «Es la primera observación de un animal salvaje tratando su herida precisamente con una planta medicinal».
En el siguiente vídeo se puede observar el proceso de sanación de la herida a través de los días. Nótese una herida en la cara del orangután el 23 de junio de 2022, dos días después aplicó sobre la herida hojas masticadas de la planta akar kuning. Finalmente cuando fue documentado el 25 de agosto la herida apenas era visible.