La ciudadana G.A.C.B. fue encontrada penalmente responsable del delito de fraude y fue sentenciada a cinco años de prisión y 200 días de multa por los hechos ocurridos en 2018 cuando pretendió vender un vehículo automotor que no le pertenecía.
Además de sentenciar a la acusada al pago de la reparación del daño, el cual asciende a 120 mil pesos; también se le negaron los beneficios de sustitución de sanciones, se le amonestó públicamente y se suspendieron sus derechos políticos.
En agosto de 2018 la denunciante acudió a un estacionamiento en el Centro de esta ciudad de Mérida, donde vio un vehículo automotor que le gustó y al preguntar por él a la acusada, ésta, a pesar de saber que no le pertenecía, se lo ofreció en venta, acordando para ello el pago de 120 mil pesos, mismos que fueron entregados en septiembre del mismo año, sin que se otorgara la posesión del automóvil.
Tras insistir en la entrega, en febrero del año 2019 la imputada reconoció que no entregaría nada y que dejara de molestarla, por lo que la afectada interpuso la formal denuncia.
Por último, antes de finalizar la audiencia de individualización de sanciones, el Tribunal de Enjuiciamiento estableció que la sentenciada tiene prohibido acercarse a la víctima por tres años más después de cumplir con su pena privativa de la libertad.
