Sucedió en plaza La Isla, en Mérida, el tipo no supo que fue grabado por las mismas cámaras del auto, por lo que el dueño ofreció una recompensa de 10 mil pesos a quien lo ayudara a ubicarlo y funcionó.
El sujeto ya fue ubicado y denunciado por lo que tendría que pagar una fuerte cantidad de dinero por los daños.
Al parecer el móvil fue la «venganza» pues el dueño del auto, compró el negocio en el que el tipo trabajaba.