Este pez, que parece ser adulto porque mide poco más de 10cm, lo ubicamos en una cueva inundada o cenote, a la que antes que nosotros aparentemente nadie había entrado, y corresponde a una especie en peligro de extinción llamada olgibia perseai, mejor conocida como “pez ciego” o “dama blanca”.
Lo sorprendente y atípico fue el sitio y la profundidad donde lo hallamos, ya que no es común verlos en estas circunstancias, debido a que comúnmente se encuentran en cuevas o cenotes confinados a la obscuridad pero a una profundidad de varios metros, lo que lo hace visible comúnmente sólo para los espeleobuzos, y en este caso, como observan, está a sólo un metro de profundidad.
Aunque es importante aclarar que se les ha visto en aguas someras pero en mucho mejor proporción.
Esta especie no tiene ojos -anoftálmicos-, ni escamas, su forma de desplazarse es similar a los murciélagos, con un tipo de “radar’, y se apoyan en otros sentidos como percepciones olfativas y químicas con las que detectan a sus presas, ya que se alimentan de otros animales como pequeños crustáceos.
Información e imágenes Sergio Grosjean